Nos vigilaba

Hola amigos, 

con la llegada del otoño y las primeras lluvias, los aficionados a la micología, entre los que nos encontramos, esperan ansiosos el brote de las primeras setas y hongos. Este año la sequía es tremenda y para poder conseguir los deliciosos Boletus, nos hemos tenido que trasladar a los bosques mas húmedos y en mayor altitud de la montaña de León.

Boletus

Pero pese a las dificultades, hemos podido disfrutar de un par de jornadas muy satisfactorias, no sólo en lo referente a los Boletus edulis y Boletus pinicola, si no al disfrute del campo y de la naturaleza en esta bella estación otoñal.

Amanita muscaria

Boletus edulis

Boletus edulis

Boletus edulis

Boletus edulis

Boletus pinicola

Como es natural, en esta ocasión nuestras miradas se dirigían al suelo, sin embargo pudimos comprobar que alguien nos vigilaba desde lejos

Rastros de Pito negro

Su característico reclamo y su particular tamborileo sobre los árboles, nos indicaba que no muy lejos de nosotros se movía un Pito Negro.

Habitante de los bosques más maduros y mejor conservados de nuestra montaña, resulta difícil observarlo por su comportamiento discreto y desconfiado. Nosotros sólo pudimos realizarle un par de malas fotos

Pito negro (Dryocopus martius)

Pito negro (Dryocopus martius)

En febrero, cuando comience su celo, será la ocasión para poder pillarlo mejor con nuestra cámara, ya que muestra entonces un comportamiento más territorial, y es más fácil de detectar.

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